- El cuerpo puede producir cambios en la mente. Al igual que el estado de la mente puede producir cambios en el cuerpo. Por medio de las asanas se generan cambios muy positivos en la mente. Las asanas traen calma mental y emocional. Se trata de una ruta somatopsíquica.
- Regulariza el funcionamiento del sistema endocrino. Las glándulas endocrinas están implicadas en multitud de funciones como el crecimiento, la reproducción y las emociones. Un buen balance endocrino tiene repercusiones positivas en el cuerpo y la mente. Una persona con un sistema endocrino sano es generalmente optimista y alegre.
- Las asanas generan armonía en el funcionamiento de todos los sistemas del organismo. Todos ellos están conectados entre si y un mal funcionamiento de uno puede repercutir en otros.
- Los músculos se alargan y gracias a ello la sangre estancada se libera y cuando el músculo recupera su forma, entra sangre fresca oxigenada.
- Los órganos vitales son masajeados y estimulados mejorando su funcionamiento.
- Las asanas generan cambios positivos en la respiración
- Elimina los bloqueos energéticos. Los bloqueos de energía se pueden formar en cualquier sitio. Existen cientos de puntos energéticos en el cuerpo y en cualquiera de ellos puede existir un bloqueo. La energía se distribuye en el cuerpo gracias a los chakras. Los chakras poseen cientos de pequeñas uniones distribuidas por todo el cuerpo. Estas uniones energéticas llamadas “nadis” pueden ser limpiadas de sus bloqueos gracias a las asanas y al pranayama.
- Gracias a la eliminación de toxinas, tensiones y bloqueos energéticos, las asanas afectan muy positivamente a todas las dimensiones de nuestra personalidad.
Fernando Pardo
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